Sobre mí
Lo que pasa es que escribir o describir quién soy es una tarea difícil. Lo es para mi y lo sería para cualquiera. No tanto por no saber que decir, pues me conozco bastante… es más bien que cuesta describir algo que es dinámico y que cambia a cada experiencia con el mundo y con los demás. No sé si soy lo que he vivido, lo que tengo, lo que pienso, las conductas que muestro… ¿Una suma de todo?
Así que en vez de describir cómo soy, mejor te explico qué puedo ofrecerte y cómo puedo ayudarte. Tanto si buscas un profesional de la psicoterapia como si buscas a un mediador que te ayude a resolver un conflicto de manera breve y efectiva, esto es lo que puedo ofrecerte:
Estoy presente
Valoro y agradezco que me invites a participar en tu proceso terapéutico o de mediación. Sé lo importante que es dar el paso y los muchos momentos en que tirarías la toalla. Para que puedas llegar hasta el final es imprescindible sentir que no caminas solo y que cuando te abres y compartes lo que llevas dentro, la persona presente lo recoge y lo abraza. Puedo asegurarte que sentirás mi presencia en cada sesión y que podrás contar conmigo siempre que lo necesites entre sesiones y durante todo el proceso.
Te escucho
¡Me encanta escuchar! Siempre he disfrutado más escuchando que hablando. Me pasaba de pequeña y me sigue pasando en la actualidad. ¡Se puede aprender tanto escuchando! Por supuesto cuando digo escuchar es algo más que estar en silencio mientras otro habla. Me refiero a poner en ti todo mi ser y mi atención, a mirarte a los ojos al recibir tus palabras mientras tu sientes mi interés y presencia. Me refiero a aquel momento de la comunicación en que te sientes entendido y sientes que la persona ha recogido no solo lo verbal, sino los sentimientos, ideas o pensamientos que subyace a lo dicho.
He estado donde tu estás
La vida ha sido generosa y a la vez a sido un sendero de obstáculos para mí. Obstáculos que no he ido esquivando, sino sacando uno a uno de mi camino. Los he visto, analizado y he aprendido a sobreponerme a ellos adquiriendo los recursos y conocimiento que ahora siempre me acompañan. ¿Cómo lo he hecho? De la manera que te invito a ti ha hacerlo, ¡a través de la psicoterapia! Sí sí… lo que oyes. Durante más de quince años he hecho psicoterapia y por ello se perfectamente como te sientes. ¡He estado en tu lugar!
Me implico y aprendo contigo
Cada terapia es una oportunidad única para ti, pero también lo es para mi. Por supuesto los beneficios de todo lo que trabajes son tuyos. Lo que pasa es que como observadora de tu proceso también soy parte de él. Todo lo que compartas conmigo, todo lo que crezcas y aprendas a mi lado, a mi también me ayudará a crecer. Como dije, voy a estar presente y te escucharé con mucha atención y cuidado. Esa implicación me hace partícipe y hace que indirectamente aprenda contigo.
Motivación y Pasión
Si hay algo que disfruto en esta vida es aprender de ella y avanzar. Me encanta ir a terapia, me encanta trabajarme, me encanta ganar aquellos recursos que no tengo. Disfruto al poner en práctica nuevas habilidades. Me fascina el mundo interior de las personas, entender las relaciones. Me complace poder ayudar a los demás a que entiendan mejor su dolor, lo recojan, integren y sigan caminando de frente. Gozo observando la vida y las personas que en ella transitan. La motivación y la pasión que me mueve la noto yo y también la notan los demás. Por todo ello decidí, a muy corta edad, que haría de ello mi profesión.
Experiencia y formación diversa
En mis treinta y largos años de vida hay algo que no he dejado nunca de hacer: trabajar y estudiar a la vez. De muy joven ya trabajaba los fines de semana y cuando empecé la universidad empezaron los trabajos a jornada completa para poder pagarla y mantenerme. ¡Si miro atrás no sé ni como lo logrado! He conseguido estudiar una carrera y formarme en aquello que me gusta – Terapia Familiar Sistémica, Duelo, Mediación, Disciplina Positiva, Recursos Humanos y un largo etc de cursos y talleres-. Además, pese a invertir enormes cantidades de dinero en dicha formación, he logrado vivir por mi cuenta en varias ciudades y países, desarrollando diferentes experiencias profesionales allí dónde he estado. Tanta diversidad experiencial solo puede traducirse en muchísimos recursos y conocimiento que son los hoy deseo compartir contigo.
Tu manera
Vivir en países diferentes, aprender un idioma, entender la diversidad, respetar la diferencia, ser capaz de relacionarte con otras culturas, de moverte entre distintas clases sociales. Dejar atrás lo conocido para adentrarte en lo nuevo, estar solo ante una sociedad que no es la tuya o ser capaz de pedir ayuda. ¡Hay tantas cosas que he podido aprender y he tenido la suerte de vivir! Y cada aprendizaje, cada competencia, cada lección es transferible a otros contextos. Por eso si trabajamos juntos no voy a decirte “cómo lo debes hacer”, porque hay tantas maneras como personas. Lo que a unos les ha funcionado puede no funcionarte a ti, así que que encontraremos juntos aquello que te funcione. Buscaremos tu manera.
Confidencialidad
Tanto si trabajamos juntos en psicoterapia como si lo hacemos en mediación, voy a intentar siempre mantenerme neutral e imparcial. Por supuesto todo lo que tratemos en las sesiones es absolutamente confidencial, respetando al secreto profesional y siguiendo el código deontológico de mi profesión.